La adrenalina y la emoción se apoderaron de un grupo de pescadores de Buenos Aires, que logró una captura inesperada: un majestuoso dorado de 1,10 metros y 30 kilos, en aguas del río Paraná en Esquina. El ejemplar, una «hembra colosal» según la describieron, fue devuelto a su hábitat natural, en un gesto que resalta el compromiso con la pesca responsable.
La hazaña fue celebrada con total euforia por los guías de pesca locales, quienes compartieron la alegría y el orgullo por el logro. «Esto es alegría total, es el reconocimiento al esfuerzo, al amor, a la pasión, a la garra que le ponemos día a día para que nuestros clientes vuelvan felices después de una jornada de pesca», expresaron en redes sociales.
El dorado fue capturado bajo la modalidad baitcasting, una técnica que requiere precisión y paciencia. «Después de insistir e insistir tiro a tiro», los pescadores oriundos de la ciudad bonaerense de Dolores finalmente consiguieron el gran pique. La lucha con el imponente ejemplar fue un desafío, pero la recompensa llegó al tenerlo por un momento en la embarcación.
Para el guía local Hernán Reboledo, la captura es más que un récord: “Para nosotros es felicidad pura tener un ratito a esta hembra colosal”, afirmó, antes de asegurarse de que fuera devuelta «sana y salva a su hogar».
Este suceso refuerza la reputación de Esquina como uno de los destinos de pesca deportiva más importantes de Argentina, atrayendo a aficionados de todo el país en busca de la experiencia inolvidable que ofrece el «tigre del río», uno de los “gigantes” del Paraná.
Fuente y fotos: Redes sociales