A mitad del año pasado, la tasa de desempleo era aquí del 8,9%. Tras una mengua importante en el tercer trimestre (3,5%), finalmente llegó a su piso al terminar diciembre. A nivel regional, Resistencia tuvo el mayor indicador con el 8,4% y el menor fue para Formosa con el 1,7%.
El Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INDEC) dio a conocer ayer el reporte “Mercado de trabajo. Tasas e indicadores socioeconómicos (EPH) Cuarto trimestre de 2024”. De ese trabajo, se desprende que la ciudad de Corrientes cerró 2024 con una tasa de desocupación del 1,9%, la más baja a lo largo del año pasado (en el primer trimestre fue del 7.5%, en el segundo de 8.9% y en el tercero 3.5%).
El comparativo interanual también fue positivo, ya que en diciembre de 2023 el desempleo en esta capital era, siempre según el INDEC, del 3,7%.
Volviendo al desagregado de octubre, noviembre y diciembre último la tasa de actividad (TA), que mide la población económicamente activa (PEA) sobre el total de la población, se estableció aquí en 43.1%, la tasa de empleo (TE) -que mide la proporción de personas ocupadas con relación a la población total- se ubicó en 42,2%.
Los ocupados demandantes de empleo llegaron al 10,8% (población ocupada que busca activamente otra ocupación). Los subocupados 8,1% (subocupación por insuficiencia de horas, visible u horaria, y comprende a los ocupados que trabajan menos de 35 horas semanales por causas involuntarias y están dispuestos a trabajar más horas).
Los subocupados demandantes de empleo 4,1% (población subocupada por causas involuntarias y dispuesta a trabajar más horas que además busca activamente otra ocupación) y los subocupados no demandantes de empleo 4,1% (población subocupada por causas involuntarias y dispuesta a trabajar más horas, que no está en la búsqueda activa de otra ocupación).
A nivel regional, el NEA tuvo al finalizar el año pasado estos indicadores: 44% en actividad (la menores cifras a nivel país) , 42,1% en empleo (también fue el menor registro entre regiones) y 4,5% en desocupación.
El menor porcentual en desempleo lo tuvo Formosa con el 1,7% (40,6% en actividad y 39,9% en empleo), el mayor lo reflejó Resistencia con el 8,4% (44,4% en actividad y 40,7% en empleo) y Posadas registró este panorama: 4,5% en desocupación, 46,9% en actividad y 44,8% en empleo.
A nivel país, en el cuarto trimestre de 2024, la tasa de desocupación en los 31 aglomerados urbanos de Argentina se ubicó en 6,4%, lo que representa una suba de 0,7% en comparación con el mismo período del 2023 (5,7%).
No obstante, registró una caída de 0,5% respecto del trimestre anterior, cuando había alcanzado el 6,9%. A nivel regional, el Gran Buenos Aires presentó la tasa de desocupación más alta (7,1%), mientras que la Patagonia registró el menor nivel (4,0%).
En cuanto a la composición de la población desocupada, el 72,5% lleva menos de un año en búsqueda activa de empleo, mientras que el 27,6% supera los 12 meses en esta situación. Además, el desempleo sigue afectando en mayor medida a las mujeres, con una tasa del 6,9%, frente al 6,1% en los varones.
Los alimentos y las bebidas siguen en alza
El índice inflacionario de marzo se encamina a tener un resultado levemente por encima del de febrero, tal cual lo reconocen desde los propios despachos de la Casa Rosada. Uno de los indicadores, el precio de alimentos y bebidas, anticipa un resultado todavía negativo para las intenciones del Gobierno de llegar lo antes posible a un indicador que perfore el 2%.
De acuerdo con la consultora Labour Capital & Growth (LCG), que en la segunda semana de marzo el precio de alimentos y bebidas a nivel nacional pegó el mayor salto en un año, con un 2,4% respecto de la semana anterior.
Con ese dato, el promedio de las últimas cuatro semanas indicaría que el costo de ese rubro sube a razón del 3,4% interanual.
Los productos que más subieron en la semana fueron Bebidas e Infusiones con el 5%; azúcar, 4,2% y carne, 3,5%. De hecho, la suba de la carne impacta en 1 punto en el índice general de LCG.
El reporte, difundido por Ámbito Financiero, agrega que al tomar la últimas cuatro semanas carne y lácteos subieron casi el 5% y explican el 70% del incremento del rubro alimentos y bebidas. Las verduras se incrementaron 3,4.
Según ese estudio estadístico, parece inviable que el Índice de Precios al Consumidor de marzo tenga un resultado menor al de febrero, que fue del 2,4%. Hay que recordar que en enero había sido del 2,2%. De cumplirse el vaticinio, la inflación de los últimos seis meses se mantuvo por encima del 2%, lo que indica una seria resistencia a perforar ese piso.
De hecho, parece que la decisión del Banco Central de desacelerar el crawling peg al 1% para marcarle una nueva base a los precios no tuvo mucho efecto, probablemente, por la sensibilidad de los alimentos a la movilidad de los dólares paralelos.