Fabián Cubero atraviesa uno de los momentos más tristes de su vida. El exjugador de Vélez Sarsfield anunció en sus redes sociales la muerte de su padre, a quien despidió con un emotivo texto cargado de amor, gratitud y recuerdos imborrables, cómo también lo hizo su propia hija.
A través de su cuenta de Instagram, Cubero publicó una foto junto a su papá y escribió: “Te vamos a extrañar mucho Pa, te amo!!”. Luego, en un extenso mensaje, expresó: “Hoy tengo un dolor enorme porque se fue una gran persona, un padre ejemplar, un gran amigo, un gran compañero de mamá y un excelente abuelo”.
El exfutbolista destacó el papel fundamental que su padre tuvo en su vida: “Un padre que supo cómo guiarme, aconsejarme, que me ayudó a enfrentar nuevos desafíos, enseñarme lo importante que es el amor incondicional a la familia, respetar a los demás, ser una persona honesta, cuidar a tus amigos, todo eso y mucho más…”.
Cubero también se mostró convencido de que su padre partió con la tranquilidad: “Seguramente te fuiste en paz, orgulloso de todo lo que lograste en tu vida”. Además, relató cómo, en el último adiós, se acercaron personas de todas las etapas de su vida para despedirlo: “Vinieron a despedirte amigos de la infancia, del colegio, de fútbol, del casino, de los taxis, toda tu gran familia”.
Con un profundo respeto y admiración, el exdeportista resumió quién fue su padre para él y para quienes lo conocieron: “Eso es lo que fuiste, un ser divino querido por todo el mundo”. El mensaje culminó con una frase que deja en claro el amor eterno que le tiene: “Buen viaje papá. Te amo y vas a estar siempre en mi corazón”.
La publicación generó una ola de mensajes de apoyo por parte de amigos, colegas y fanáticos, quienes le enviaron sus condolencias y palabras de aliento. Figuras del deporte y del espectáculo dejaron comentarios expresando su cariño hacia Cubero en este momento tan doloroso.
Con estas palabras, Fabián Cubero no solo despidió a su padre, sino que también dejó en claro la importancia de la familia, el respeto y la honestidad, valores que —según él mismo relató— fueron enseñanzas directas de quien hoy ya no está físicamente, pero permanecerá para siempre en su corazón y en sus recuerdos.