El Gobierno aprobó la puesta en marcha de un plan de regularización de deudas para que distribuidoras eléctricas cancelen sus compromisos con la Compañía Administradora del Mercado Mayorista Eléctrico (Cammesa).
El proceso de saneamiento de deudas del sector eléctrico se implementa mediante la Disposición 1/2025, publicada este miércoles en el Boletín Oficial, con el objetivo de que distribuidoras y cooperativas eléctricas salden sus obligaciones pendientes con Cammesa al 30 de noviembre de 2024, que asciende a unos 1100 millones de dólares. Edesur y Edenor son las dos empresas a la cabeza de la lista de deudores, que tamvbién incluye a las distribuidoras de la provincia de Buenos Aires y coopderativas de todo el país.
El gobierno de Javier Milei busca poner en marcha un reordenamiento en el sistema eléctrico del país. En este marco, este miércoles anunció la implementación de un plan de regularización de deudas del sector eléctrico como primer paso. El objetivo, se señaló desde el Ejecutivo, “es poner fin a un esquema de morosidad crónica” que se originaba, según las autoridades, en las políticas tarifarias dispuestas por gobiernos anteriores.
En su artículo quinto, la disposición establece que “a aquellas distribuidoras que no adhieran al presente Régimen y mantengan con CAMMESA y/o el Mercado EléctricoMayorista obligaciones no canceladas debidamente en otros regímenes, se le iniciarán los procesos ejecutivos correspondientes a fin de normalizar su situación”.
El plan ofrece condiciones de pago accesibles, incluyendo hasta 12 meses de gracia y 72 cuotas con una tasa equivalente a la mitad de la fijada por el Mercado Eléctrico Mayorista para deudas en mora. A su vez, impone requisitos estrictos: las empresas deberán mantener al día sus deudas corrientes y presentar planes de inversión en infraestructura para mejorar la calidad del servicio. El incumplimiento de estas condiciones resultará en la pérdida automática del beneficio y posibles sanciones.
Las distribuidoras habían comenzado a regularizar sus pagos luego de los aumentos de tarifas que se les otorgaron el año pasado, pero aún restaba regularizar el stock que hacia fines del año pasado estaba en torno a los US$ 1100 millones.