Los futbolistas Ángel Di María y Leandro Paredes son investigados por la justicia italiana por un escándalo que involucra apuestas ilegales. Los campeones del mundo estarían involucrados en una red de doce jugadores mencionados en un chat donde se filtró en medio de una investigación.
El diario Corrierre della Sera informó que hay investigaciones en los teléfonos de Sandro Tonalli y Nicolo Fagioli, que fueron incautados en octubre del 2023. Allí descubrieron la existencia de una red de futbolistas que participaban de apuestas ilegales.
Los jugadores investigados fueron compañeros de Di María y Paredes en la Juventus y fueron sancionados en 2024 con diez y siete meses de inhabilitación para Tonalli y Fagioli, respectivamente.
La explicación de la Justica italiana, los jugadores realizaban transferencias de grandes sumar de dinero a dos intermediarios vinculados a plataformas ilegales de apuestas. Asimismo, ellos se relacionaban con tres administradores de una joyería de Milán, la cual actuaba como banco para saldar las deudas vinculadas al juego.
La fiscalía de Milán incautó €1 millón y medio y solicitó arresto domiciliario para cinco personas en la causa. Pero no se trata de arreglo de partidos, sino de temas referidos a otros deportes entre diciembre del 2021 y octubre del 2023.
Como lo que creen los investigadores que el objetivo de los jugadores era “matar el tiempo libre durante las concentraciones”, ellos no tendrían riesgo penal, pero sí una sanción vinculada con la Federación Internacional de Fútbol Asociación.