19/02/2025 17:38hs.
Tres minutos y medio necesitó Kylian Mbappé para abrir el marcador ante el Manchester City este miércoles, en la vuelta de los playoffs de la Champions League. Con la imponente camiseta blanca, y al mejor estilo Real Madrid, el francés picó al vacío, le marcó el pase a Raúl Asencio y éste, desde lejos, le puso una pelota bárbara. Ya en la puerta del área, Kiki la dejó picar una vez y la agarró con su derecha para colgársela a Ederson, que nada pudo hacer.
Pero no frenó ahí: 30 minutos después, recibió la asistencia de Rodrygo en el área y, con su tremenda gambeta, hizo pasar de largo a Josko Gvardiol y marcó el 2-0.
Dos goles en dos secuencias veloces, que sólo pueden ser fabricada por killers como Mbappé. No es aleatorio el notable presente del francés, quien lleva ni más ni menos que 13 goles en sus últimos 11 partidos. Además de este doblete ante el City, le marcó uno al Osasuna (Liga), otro a los Citizens en la ida (Champions), otro al Atlético de Madrid (Liga), tres al Valladolid (Liga), uno al Red Bull Salzburgo (Champions), dos a Las Palmas (Liga), uno al Celta de Vigo (Copa del Rey) y uno al Barcelona (Supercopa de España).
Se lo exigió y mucho desde su llegada. Los hinchas, impacientes, le reclamaban esas grandes actuaciones que tenía en el PSG y en la selección de Francia. Y no respondía el delantero de 26 años. Pero trabajó, confió y, tras varios meses de altibajos, encontró esta regularidad. ¿Se trataba de adaptación? Seguramente, como así también de administrar las presiones que suponen un club de la talla del Real Madrid -acaso el más grande del mundo-.
Lo cierto es que, a siete meses de su llegada, el Madrid encuentra en Kylian, quien ya lleva 25 goles en 37 partidos en el club, a su arma letal. Y con balas claves en la competencia que más le place a los merengues: la Champions.
Mbappé, intratable. (Foto: EFE)